A veces diria
que estás amargo
Por momentos
se te filtra la ironia
y te tornas agridulce
La mirada melosa
te deja vulnerable
crudo
casi sin asar
Después retornas
a la normalidade salada
de las lágrimas
Um dejo apimentado
te trae de nuevo
a la punta de la lengua
la misma con
la que supiste acariciar
Nora Ibarra
Florianópolis-Brasil Septiembre 2016